11/25/2009

Soy yo, no soy yo.




Sentada frente al halógeno del cuarto de interrogatorios, con la ropa rasgada y desmelenada, no pudo más que confesar.
"No soy la que crees que soy, soy todo lo contrario. Soy al revés. Soy un caos de improvisación que nunca está preparada. Soy libre. Soy música con voz fuerte y contundente. Soy independiente, nunca soy el resultado de lo que crees. Soy felicidad, la que huye del odio, la que se baña en tristeza. Soy parte de mí misma. Soy yo sola, independiente. Soy verdad. Soy la que no para quieta ni un segundo, soy la que vive. "

Tras cinco horas sentada en la misma silla, ese fue el único momento en el que el polígrafo dijo que decía la verdad.








Que ser valiente no salga tan caro,
que ser cobarde no valga la pena. 

11/21/2009

Preguntas




Nadie pregunta si no quiere saber una respuesta. 


Tú también tienes que saber 
que a veces no tengo mi papel.
Ser valiente no es cuestión de suerte,
es cuestión de verte.

11/17/2009

Zás, y se dio la vuelta.





“El truco está en una sensación.”
A esta conclusión, a la edad de veinte años, ha llegado, Marco.
Marco es un chico como cualquier otro. Vive con sus padres y su hermano en una típica villa de provincia, al sur de Francia. Tienen un perro. Se llama Peter.
Es un chico feliz, los años de la infancia son un recuerdo sereno sobre el que medita e imagina cada vez más.
Estudia en Toulusse y está en cuarto de ingeniería informática, una rama que le tiene completamente enganchado y anonadado. Le gusta la electrónica y la arquitectura del cuerpo humano; su pasión es conseguir concebir un mecanismo bioinformática, una asociación entre la posibilidad software y la realidad celular.
Entre una clase y la otra, está con Xavier y Damian, el Calvo.
“¿Qué tipo de sensación?” pregunta Xavier.
Una sensación cualquiera”, responde. “Lo importante es la realidad de la sensación. No qué tipo de emoción”.
“¿Sensación o emoción?” dice el Calvo.
¿A caso importa? Lo que quiero decir es que la potencia de todo está en la posibilidad de percibir. ¿No es extraño?”
Sí, bueno…lo es” confirma Xav.
“Extraño, extraño” también Damian “para mi es algo que está en lo trascendente, algo que aunque es parte de nosotros no podrá nunca ser entendido por completo. Quizá esto es lo que nos empuja a estudiar: para entender”.
“See….”
“Incluso si nunca llegamos. Seguiremos sin llegar,” dice Marco.
A Xavier se le escapa una risotada.  Si seguimos con estos discursos pedantes se me quitan las ganas de estudiar. ¿Qué no?”
El Calvo también se rie, “Claro que un café ahora…..”
Marco hace un guiño con la ceja. Una carcajada los acompaña.
Tengo que llamar a mi hermano para preguntarle que ha pasado con el coche” dice Marco, “os veo allí”.
La sensación de percibir es algo innato.
Siempre le han dicho que los mejores años de la vida son los de la infancia, pero últimamente no parece tan convencido. La situación de su vida le parece como una espiral temporal, una involución interrumpida, una alternancia día y noche y después de nuevo día y después todavía noche.
¿Por qué tiene que terminar?
¿Por qué me tengo que terminar a mi tiempo?
He nacido para tener que morir, ¿Posible?
Es un rompecabezas que no logra solucionar, pero la obstinación de saber le impone la necesidad de encontrar una explicación que tenga algo razonable.
No quiere morir, le gusta demasiado la vida y…. se ha enamorado.

11/14/2009

Mañana




....Vale, trato hecho, intentemos imaginar qué pasará mañana:

Silencios, pocas palabras, quizá dichas o escritas por personas que no saben, que no tienen fuerza, las ganas, la fantasía de decírnoslas como las hemos sentido siempre hasta ahora.

Todos los pequeños besos desvanecidos, su fuerza, sus heridas, su traza de recuerdos, sólo algo que nos hará todavía más daño, que nos herirá todavía más.

Demasiado solos para tener miedo de las alegrías. Y qué importa si luego estas alegrías se mutarán en dolores, por lo menos podremos consolarnos con lo que sentimos al principio.

Renunciando se va solo contra el dolor, y contra la alegría.

¿Por qué tenemos miedo a estar bien?
¿Dónde perdimos el valor?

11/10/2009

Biografía de un desastre



Su historia fue recopilada del cubo de basura de una vieja casa en ruinas:

Nació casi nueve meses antes de lo que nunca se había previsto, más bien de lo que se había imprevisto.
Comenzó a andar cogida del bastón de su abuelo y aprendió a leer tomando sopa de letras. No sabemos si supo hablar porque nunca dijo nada.
Perdió el tiempo coleccionando calendarios y nunca llegó tarde a ningún lugar, porque jamás fue. 
Era tan delgada que siempre pasaba desapercibida.
Y nunca encontró a su príncipe azul porque era daltónica. 

No sabemos si murió. No sabemos si vivió. 

11/08/2009

Sabina.



"Cuando se desprometen las promesas...
la infame soledad,
es un partido mejor,
que la peor de las sorpresas."




La corriente tira
hacia un oleaje color marrón.

11/05/2009

Fetichismo




Carol le empujó sobre el sofá.
Él se quedó perplejo, con la cabeza ladeada y hacia atrás, observándola desnudarse.
Tenía los labios pintados de color carmín y los ojos negros como el azabache.
Llevaba ligas de encaje y sandalias de tacón a juego con su sostén y su tanga de color negro. Mientras tanto, su larga melena caía sobre ella hasta el ombligo.
La deseaba.

-Fóllame. Fóllame hasta morir, muérdeme, haz conmigo lo que quieras y gime de placer mientras te vas dentro de mi. 


Entonces le arrancó todo lo que llevaba puesto y entró en ella como si fuera lo última vez.
Y el resto del mundo quedó atrás.

11/02/2009

En el fondo lo deseaba.



    El sol sofocante de mediados de julio hacía chorrear el sudor por sus piernas. La arena parecía arder abajo, en la playa, y el mar estaba llano como un plato, incapaz de regalar una brizna de brisa.
    Llevaba puesto un sombrero de paja y una camisa azul marino que dejaba transparentar su sujetador a rayas con encaje. Gafas de sol.
   Paseaba entre la gente con su cigarro en la mano y su sonrisa buscona.
-Richard, querido, un bitter kas- sin una gota de alcohol el sabor amargo incluso endulzaba la acidez de su carácter. Sarcástica, irónica y extremadamente corrosiva.
-Hoy estas preciosa, Georgie - contestó él mientras levantaba la mano al camarero y se fijaba en las kilométricas piernas subidas en unos tacones de más de ocho centímetros.
-Eso es porque nunca me has echado un polvo. - impávida se quitó las gafas de sol.
-Tiene solución. Ahora mismo. - Richard le propuso.
Sonriéndole, pícara, se levantó de la mesa con su bebida roja en la mano izquierda y poniéndose las gafas con la derecha: - Si lo hiciera, ya no sería un reto para ti. 
Se agachó dejando ver el canalillo y le dio un beso en la mejilla, marcándole con su pintalabios color carmín.